El Pleistoceno superior de la zona de Junín se caracteriza por sedimentos originados por depósitos eólicos.
Los sedimentos están representados por arenas muy finas de color pardo rojizo con abundante limo- arcilla , con escasa estratificación.
Por encima de esta capa se encuentran los sedimentos más modernos representados por un limo arcilloso de color gris ligeramente verdoso que en seco pasa a un gris claro ceniza con abundantes fragmentos de conchillas muy rotas, que evidencia un aporte aluvial en la formación de este suelo. En algunas partes está cubierto por sedimentos propios de la acción aluvial actual
En la zona que ha sido canalizada en 1992 esta capa estaba mezclada con los sedimentos más antiguos. Sólo a nivel del lecho del río y a la vera, en las barrancas que habían sido socavadas por la erosión de las corrientes de agua, se encuentran los sedimentos en su disposición original.
Al comienzo del Lujanense el río Salado ya estaba formado, como lo demuestran la presencia de estos sedimentos en su valle.
Al nivel del lecho del río los sedimentos forman la estructura conocida comúnmente como tosca, posiblemente más antigua que los sedimentos depositados al mismo nivel, pero en las orillas del río. Este estrato es portador de pocos fósiles cuya contextura es más sólida y están muy deteriorados e incrustados casi totalmente en la tosca. Se reconocieron restos de Hippidion, de Megatherio americanum, que sirven para inferir que la antigüedad del estrato no escapa del Lujanense.